Flor del Aurora

 











I. MEMORIA

Cada reminiscencia de la vida, 

diamante que el aurora reluce, 

el firmamento la custodia.


El alma del ser amado  

es nostalgia en el tiempo:  

viento que azota el latido,

rocio que destila el dolor. 


El ocaso la desdibuja,  

mas la esperanza la borda  

con hilos de luz eterna. 


La memoria graba

su manantial existencial

en cantos y ecos de luz 

que atraviesan 

el firmamento.



II. BELLEZA

La belleza 

en el universo 

no tiene bandera, 

ni color, ni nación.

tiene rostro configurado

en moral.


 Es luciernaga

que nace en la oscuridad.


Brota como la flor 

en la hendidura de una pared, 

o entre los escombros 

de un cataclismo,


Y aún así ser el primer 

suspiro de la creación,

como la humanidad.


III. UNIDAD

La amistad es puente de oro  

entre dos desiertos inhóspitos,

que separan latidos 

de igual consonancia.


Es pan que calma el hambre,  

abrazo que deshace el caos,


Ahora espejismo roto que 

enjaulaba pajarillos libres.


El amor es el lenguaje universal

que preserva la existencia vital

sin grafía, sin color y sin límites 

que las cartografías no logran descifrar.


IV. CONOCIMIENTO 

La virtud es el árbol 

que florece en el barro; 

la decencia, su savia silente; 

la ciencia, la simiente 

que ninguna cicuta marchita.


Estos pilares forjan al hombre, 

lo tornan:

en pensador, 

en buscador,

en arquitectos 

            del porvenir.


Donde el filósofo 

es el reflejo de la construcción 

                 de sus conocimientos.


Los rencores, 

           el engaño,

                     la felonía 

son mazmorras de indigencia, 

moradas de pueblos caídos 

en el eter negativo de la matrix, 

donde el conocimiento 

es tesoro vedado y la certeza

es destierro, verdugo ciego.


V. HUMANIDAD

La humanidad es océano  

que escribe con lágrimas  

su nombre en la historia.  


Es diente que muerde  

las sombras del pasado,  

fuego que en tierra fértil  

multiplica el futuro y

dibuja el desarrollo colectivo.


VI. LUZ

Mas esta es la hora 

en que el alba, 

afilada como espada,

hiende las tinieblas 

en mitades y nos restituye

el calor y alma humana.


La sapiencia rugiente  

derrota al mal, 

quiebra cadenas mentales

y enciende la conciencia social,

el único faro en la tinieblas.


--Christian Aycho Carbajal 



"En memoria a quienes

dejaron huellas imborrables

en mi corazón y para quienes 

aún tienen sed de luz".





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